El pasado 24 de febrero, realizamos una ruta por nuestro berrocal.
El tiempo acompañó y, con ilusión, alegría y algo de esfuerzo, hicimos una ruta que nos llevó a lugares donde la historia aún está escrita.
La ermita de Santa Ana, el Molino, la Molineta y por último, El Lavadero.
Patrimonio de siglos, cada uno con diferentes usos pero, todos, parte de nuestro patrimonio cultural e histórico.
1º Parada:
Descanso en La ermita de Santa Ana situada en el campo de San Juan y en tiempos fue una hermosa ermita con bello retablo.
Su campana fue llevada a Santa María La Mayor.
2º Parada:
El molino, situado en lo alto del Berrocal y donde nos hicimos una preciosa fotografía que nos permitirá recordar nuestra experiencia.
3º Parada: La Molineta.
Aquí disfrutamos oteando un magnífico paisaje. A un lado, Trujillo y el resto un vasto paisaje que nos hizo imaginar ser soldados o viejos sarracenos vigilando si se acercaba el enemigo.
Se cuenta, que ambas torres, ayudaban la vigilancia de la ciudad que desde el castillo se daba.
Nos hizo mucha ilusión subir a lo alto y contemplar nuestro valioso berrocal.
4º Parada: El lavadero.
Curioso es ver el diferente uso de las pilas que realizaron nuestros alumnos. Donde en otros tiempos, las mujeres y lavanderas iban a lavar sus enseres, ellos las utilizan para jugar, descansar....
Afortunadamente, todo evoluciona pero, las historias, leyendas y costumbres del pasado hay que conocerlas para aprender a valorar todo lo nuevo que vaya surgiendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario